El manejo del dolor en pacientes con cáncer es fundamental para mejorar la calidad de vida de quienes enfrentan esta enfermedad. El dolor oncológico puede ser causado por el tumor mismo, tratamientos como la quimioterapia o radioterapia, o por procedimientos quirúrgicos. Este dolor puede ser agudo o crónico, y su intensidad varía según el estadio del cáncer y la ubicación del tumor. El tratamiento del dolor en pacientes con cáncer generalmente sigue un enfoque multimodal. Se utilizan analgésicos según la escala del dolor del paciente, que va desde analgésicos no opioides, como paracetamol o ibuprofeno, hasta opioides para dolores más intensos, como la morfina. En casos de dolor neuropático, que resulta del daño a los nervios, se pueden emplear antidepresivos o anticonvulsivos. Además de los medicamentos, el manejo del dolor en el cáncer incluye terapias complementarias como la fisioterapia, acupuntura, técnicas de relajación y terapia ocupacional. Estas intervenciones ayudan a reducir la percepción del dolor y mejorar el bienestar general del paciente. La atención psicológica es igualmente crucial, ya que el dolor crónico puede impactar significativamente en la salud mental del paciente. En Ramazzini, entendemos la complejidad del dolor en pacientes con cáncer. Por ello, ofrecemos un enfoque integral que combina tratamientos médicos avanzados con terapias de apoyo emocional. Nuestro objetivo es proporcionar un alivio efectivo del dolor y mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes, permitiéndoles llevar una vida más cómoda y digna.