La alimentación desempeña un papel fundamental en la salud general y, más específicamente, en la fertilidad tanto femenina como masculina. En los últimos años, múltiples estudios han demostrado que ciertos patrones alimentarios y nutrientes específicos pueden influir directamente en la capacidad de concebir. Adoptar una dieta equilibrada no solo mejora las probabilidades de embarazo, sino que también contribuye a un inicio saludable del proceso gestacional. El equilibrio hormonal es esencial para la fertilidad, y la dieta juega un papel clave en su regulación. Por ejemplo, el consumo excesivo de alimentos ultraprocesados, ricos en grasas trans y azúcares refinados, puede causar resistencia a la insulina y afectar negativamente la función ovárica. Por otro lado, una dieta rica en antioxidantes provenientes de frutas y verduras, ácidos grasos omega-3 de pescados grasos y vitaminas del grupo B mejora la calidad de los óvulos y espermatozoides. La salud del peso corporal también está directamente relacionada con la fertilidad. Tanto el sobrepeso como el bajo peso pueden alterar la producción hormonal y reducir las probabilidades de concepción. En las mujeres, estas condiciones pueden llevar a ciclos menstruales irregulares o incluso a la ausencia de ovulación. En los hombres, la obesidad se ha asociado con una menor calidad del semen. Por ello, alcanzar y mantener un peso saludable a través de una dieta equilibrada y ejercicio regular es un objetivo crucial para quienes buscan concebir. Además de los nutrientes básicos, existen otros compuestos que pueden beneficiar la fertilidad. El ácido fólico, por ejemplo, no solo es vital durante el embarazo, sino que también mejora las tasas de ovulación en las mujeres. El zinc, el selenio y la vitamina E son esenciales para la producción de espermatozoides sanos. También se ha observado que el consumo moderado de lácteos enteros, en lugar de desnatados, puede tener un efecto positivo en la ovulación. En Ramazzini, comprendemos la importancia de la nutrición en la salud reproductiva y ofrecemos orientación personalizada para quienes buscan optimizar su fertilidad a través de cambios en su dieta. Nuestro enfoque multidisciplinario combina la experiencia de ginecólogos y nutricionistas para garantizar que cada paciente reciba un plan de cuidado integral. Alimentarse bien no solo es clave para la concepción, sino también para establecer un sólido comienzo en el camino hacia la maternidad y paternidad.