La menopausia es una etapa natural en la vida de las mujeres, marcada por cambios hormonales significativos que tienen un impacto directo en la salud ósea. La disminución de los niveles de estrógeno, una hormona clave para mantener la densidad ósea, puede aumentar el riesgo de osteoporosis y fracturas. Comprender estos efectos y tomar medidas preventivas es esencial para proteger los huesos durante y después de la menopausia. El estrógeno desempeña un papel crucial en la renovación ósea al equilibrar la destrucción y formación de hueso. Durante la menopausia, la reducción de esta hormona acelera la pérdida ósea, especialmente en los primeros años tras el cese de la menstruación. Esto hace que las mujeres sean más susceptibles a fracturas en la cadera, la columna y las muñecas. En Ramazzini, destacamos la importancia de la detección temprana mediante densitometrías óseas para identificar a tiempo la pérdida de masa ósea. La prevención de la osteoporosis comienza con una dieta rica en calcio y vitamina D, fundamentales para la formación y mantenimiento de los huesos. Los productos lácteos, los pescados grasos y los vegetales de hoja verde son excelentes fuentes de estos nutrientes. En algunos casos, el médico puede recomendar suplementos para alcanzar los niveles óptimos necesarios. El ejercicio también juega un papel vital en la salud ósea. Las actividades de impacto moderado, como caminar, subir escaleras o practicar yoga, fortalecen los huesos y los músculos, reduciendo el riesgo de caídas y fracturas. Además, el ejercicio regular mejora el equilibrio y la coordinación, factores clave en la prevención de lesiones. En casos de pérdida ósea significativa, el tratamiento médico puede incluir medicamentos como los bifosfonatos, que ralentizan la destrucción ósea, o terapias hormonales para compensar la disminución de estrógeno. Es fundamental que estas intervenciones se personalicen según las necesidades individuales y se supervisen regularmente. La menopausia no tiene que ser sinónimo de debilitamiento óseo. Con un enfoque integral que combine hábitos saludables, evaluaciones regulares y tratamientos adecuados, es posible mantener la salud ósea y disfrutar de una vida activa y plena. En Ramazzini, acompañamos a nuestras pacientes en cada etapa, promoviendo estrategias preventivas y tratamientos efectivos para proteger su bienestar.